jueves, 26 de noviembre de 2009

Tavira y el rio Giao


Son poco más de una veintena los kilómetros que separan Castro Marim de Tavira. Tanto por la N125 o por la autovía del Algarve podemos llegar a la Villa de Tavira.


Puedo pasar horas y horas paseando por las orillas del río Gilao, viendo como pobres mariscadores, aprovechando la subida y bajada de las mareas para rebuscar en el fango algún que otro berberecho; esperando que un oxidado puente de hierro en cualquier momento se venga abajo, para mayor gloria de su vecino puente romano. Pasar el tiempo muerto tomando un buen café, que en España me niegan, acompañado de sus pasteles, o contemplando la belleza que guardan algo tan simple como son unas chimeneas. ¿Como algo tan insignificante puede ser tan bello? Cuando cruzo el Guadiana en dirección hacia donde se pone el Sol, admiro y miro esas formas tan simples y blancas como si estuviera en el mismo museo del Prado.
La villa de Tavira, de poco más de 8.000 habitantes y 17.000 incluyendo sus feligresías, es junto a Faro, de la ciudades más interesantes del Algarve portugués. En ella se encuentran vestigios romanos, aunque su mayor esplendor como centro comercial lo alcanzó en el Siglo XVI; tras el terremoto de 1755, que dañó gravemente a la ciudad, entró en un constante declive. Ahora sobrevive como un incipiente centro turístico, no del todo masificado y de una pesca cada vez más escasa.

lunes, 16 de noviembre de 2009

Castro Marim y su Castillo.




Antes de que existiera ese gran puente que une a dos paises sobre el río Guadiana, los asiduos visitantes en busca de toallas, mantas y café, con el primer pueblo que se encontraban era Vila Real de San Antonio. Una agradable villa en la misma desembocadura del rio; pero ahora la bienvenida al Algarve la da una preciosa fortaleza en lo alto de un cerro de la villa de Castro Marim.
Castro Marím, pequeña villa, junto al estuario del río Guadiana y rodeado de salinas, se encuentra defendida por dos preciosas fortalezas aún existentes, aunque sólo una es visitable; es pueblo tranquilo, excepto los días de mercado, cuando los vecinos de las feligresías próximas se acercan para comprar o vender las hortalizas sus huertos o sus buenos quesos artesanales.
Su origen está situado por algunos historiadores en época fenicia, y su castro fue paulatinamente ocupado por cartagineses, romanos, vándalos, árabes hasta la reconquista cristiana. Las prmeras murallas datadas en el castillo son del siglo VIII a c. Fueron los árabes, quieres compredieron la gran importancia estratégica del puesto y comenzaron la construcción de una verdadera fortaleza.
Durante el reinado de Sancho II, es la Orden de Santiago quien reconquita la villa en 1242. Pocos años depués, en 1279 D. Dinis refuerza la construcción.
En 1319, tras la disolución de la orden del Temple por el Papa Clemente V, el Castillo pasa a manos de la Orden de Cristo, sucesora de la perseguida orden del Temple en el reino de Portugal, donde encontró refugio. El castillo pasa a ser residencia del Infante D. Henrique, maestre de la orden y vive su mayor explendor.
Durante la Guerra de la Restauración, se ve reforzada y adaptada a la artillería y se construyen los fuertes de Sao Sebastiao y Santo Antonio. Tras el terremoto de Lisboa en 1755, en el que quedó gravemente dañado fue reparado por órden del Rey D. José I. Actualmente la fortaleza es monumento Nacional y en su interior tiene un pequeño museo arqueológico.

jueves, 5 de noviembre de 2009

Paseos por Portugal - Capítulo 1 - Introducción

Si hiciésemos una encuesta sobre quien es el primer ministro o presidente de la República de Portugal, muchos no sabríamos que contestar. No pasaría lo mismo si preguntásemos quien es el presidente de la República de Francia o el Primer Ministro italiano. Siendo Portugal un país tan cercano y vecino para muchos de los españoles es una gran desconocida, desconocemos demasiado de su política, de su sociedad y su cultura.


Pero ante todo Portugal es un país extremadamente fascinante, me atrae y me gusta perderme por él. Tal vez porque en algo recuerda a la España que conocí cuando llegué, menos tecnificada, más natural y espontánea y sin que la fiebre urbanizadora del ladrillo le afectase, pero como todo mal, este también ha llegado a contaminar a nuestro país vecino y desconocido.



En la primera serie vamos a visitar la zona más próxima a España, una ruta para hacer y volver tranquilamente en el día: Castro Marím - Tavira -Ilha de Tavira